FÁBULA SINARQUISTA
POR: SERGIO ESTRADAEstábamos en el Ixtlán (Jalisco)। El Camino era seco a pesar de que escuchábamos el ruido lejano de un río। Íbamos con la ropa de milicia. La excursión era estricta. Marchábamos de campamento. Silencio mientras caminábamos para compenetrarnos del poder de la Tierra y que las ideas poco antes debatidas calaran hondo.
Jodido... Esto es difícil, dice el compañero Pablo El Jefe Mota lo manda callar. Esto no es juego. Debemos aprender a hacer Silencio. Saber cuando hablar y saber cuando callar.
Pero ya duelen los pies, jodido! Volvió a quejarse el compañero, novato aún en éstas lides. El Jefe nos detiene a todos: "llevamos caminando una hora... Quien mas está cansado?" Desconfiados, miramos unos a otros como no atreviéndonos a reconocer el cansancio físico que nos agobiaba। "Escuchen compañeros: pueden quejarse, pueden hasta lamentarse y llorar bajo el peso de las mochilas. Pueden si quieren insultarme y regresarse a su casa... Pero escuchen: Hace unas horas, hablaban de una patria nueva, hablaban de justicia, de lucha, de participación. Ahora, reniegan y se lamentan y lo único que hemos hecho es caminar una hora. Pero les voy a decir: ven aquel cerro? - señaló una loma alta, mas alta que las abruptas peñas anteriores- Ese cerro es donde está el Hombre Nuevo.
El Hombre viejo es éste: el que prefiere quejarse cuando apenas ha caminado, el que se lamenta cuando el camino parece difícil। Compañeros: el hombre viejo es el que traiciona y prefiere rajarse cuando las cosas no avanzan fácil. Hagan trampa, pásenle la carga de la lucha al otro, al que se deje. Corrómpanse: páguenle a otro para que los cargue y róbenle sus provisiones.
Compañeros: si quieren pueden quedarse así: como hombres viejos। como rebaño vencido, que solo en el discurso es combativo, pero en las primeras jornadas se declara derrotado por el cansancio. Ahí está el hombre Nuevo compañeros: arriba del cerro: es nuestro objetivo: el que aprende a vencer su comodidad y cansancio personal, el que es solidario y fraternal. El que persevera, el que se vence y se traga las frustraciones y las rabias. Ahí está esperándonos el Hombre Nuevo Compañeros... y tiene sus propias caras".
Jodido! Ahora si que el Jefe Toño Mota nos dio en la herida। Nos vimos... Tenía razón el carajo. Estábamos renegando por un camino corto. Y nosotros proclamando la "lucha por la Nación y el Pueblo", como si esta lucha fuera mas sencilla.
Nos miramos। El Jefe Toño ya se había puesto en marcha. Se ajustó su mochila, y siguió sin voltear. El Hombre Nuevo está en la punta del cerro, nos dijimos... Y después de sonreír como bobos, empezamos a avanzar. CARAJO !!! Tiene razón.... Seguimos la marcha por otra hora y media y les juro que ya no la sentimos. Todos sentíamos que podíamos ser ese Hombre Nuevo, que podíamos ser como Juan Ignacio, como José Antonio.... Que podíamos de verdad conquistar lo inconquistable. En la noche, dormimos como benditos, sabiendo que al menos ese día, supimos vencer nuestra comodidad y que no fuimos traidores ni nos ablandamos.
Que fuimos al menos esa excursión, el Hombre Nuevo Sinarquista, el que lucha por su Nación , por su Pueblo y por su Honor।
( Texto de 1993. Ixtlán, Jalisco)
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