miércoles, 24 de noviembre de 2010

DISOLVER LA CONGREGACIÓN DE LOS LEGIONARIOS DE CRISTO SERÍA LO MEJOR DECISIÓN

Por: Fernando Lozano
ASI-NACIONAL

Hablar de temas de religión y de política siempre es causal de polémica por el malestar que se pueda ocasionar en las personas de poco criterio y que no tienen razonamiento para debatir y digerir con la seriedad y la verdad que se requiere para el caso.

Con relación a las atrocidades cometidas por el padre Marcial Maciel, por sus gustos por la pederastia, las drogas, el desmadre y la diversión desenfrenada, mucho se hablo del caso entre los católicos que desconcertados no sabíamos que era lo que realmente pasaba.

En los colegios Alpes San Javier el rumor llegaba mas a fondo, en una entrevista con unos trabajadores se me informo que la defensa sobre marcial era ciega, incluso el solo hecho de cuestionar ¿Quién lo señala?, era indigno y visto con malos ojos por las consagradas, quienes nombraban al padre marcial “Santo Padre” y se aferraban a que eran ataques infundados por el odio de los enemigos de la iglesia, pero el enemigo principal de la iglesia era el propio padre Marcial Maciel.

Finalmente el Vaticano a través del papa Benedicto XVI reconoció por primera vez que existieron “atrasos y lentitud” para atender las denuncias de abuso sexual de menores contra el fundador de los Legionarios de Cristo, por el sacerdote Marcial Maciel Degollado.

En un fragmento del libro-entrevista Luz del mundo, que salió a la venta este 23 de noviembre, el Pastor Universal calificó al iniciador de la congregación mexicana como un “falso profeta” que condujo una “vida disipada y extraviada”.

En opinión del pontífice, el descubrimiento de la doble vida del fundador “conmovió” a la Iglesia tras aceptar que las acusaciones contra el sacerdote mexicano “hacía años” que se conocían. Pero se prefirieron guardar y la iglesia hizo caso omiso del caso, tal y como le paso al Cardenal Juan Sandoval Iñiguez, cuando varios de los afectados pertenecientes a la propia congregación Legionarios de Cristo le hicieron saber sobre el caso, el propio cardenal juzgo a los acusados de herejes y traidores a la iglesia, desechando la oportunidad de hablar con el Papa sobre el caso.

Las acusaciones sobre Marcial fueron llegando muy directamente y se fueron elevando, y las autoridades eclesiásticas tomaron el caso a la ligera y se hicieron los desentendidos pero el daño a la propia iglesia ya estaba haciendo efecto. Pecaron de omisión.

“Lamentablemente, hemos llegado con mucha lentitud y atraso a abordar estas cuestiones. De alguna manera estaban muy bien ocultas y sólo desde aproximadamente el año 2000 contamos con asideros concretos al respecto”, estableció en una entrevista el Papa Benedicto XVI.

El Papa calificó la figura de Maciel, como “enigmática”, porque por un lado vivió fuera de la moralidad e inmerso en aventuras y, por el otro, construyó con dinamismo y fuerza la comunidad de la Legión.

Sobre la congregación Legionaria el papa dijo que “Hay que hacer correcciones, pero en términos generales, es una comunidad sana. Hay en ella muchas personas jóvenes que quieren servir con entusiasmo a la fe. Muchos de ellos partieron de una figura falsa, pero al final se han visto llamados a adherir a una correcta”, “Este es el hecho notable —añadió—, la contradicción que, por así decirlo, un falso profeta haya podido tener un efecto positivo. A esos jóvenes hay que darles un nuevo aliento. Hace falta una estructura nueva para que no caigan en el vacío.” señaló.

Oficialmente las primeras denuncias de las víctimas de Maciel las recibió el vaticano en 1998, el proceso eclesiástico en su contra comenzó a inicios de 2005, con la toma de declaraciones a los denunciantes en Estados Unidos y México. Pero desde antes ya había quejas y denuncias contra el padre Marcial, pero se guardo un silencio hermético y cobarde.

En mayo del 2006, El Vaticano ordenó al sacerdote mexicano retirarse a una vida “de oración y de penitencia”, alejado de toda actividad pública. Así se mantuvo hasta su muerte en enero de 2008. Sólo ese fue su castigo en la tierra.

Si la iglesia califica a Marcial Maciel de “falso profeta” las disculpas públicas de los Legionarios de Cristo no son suficientes y la mejor medida para este caso es DISOLVER la comunidad de los Legionarios de Cristo. Y los sacerdotes, consagradas y los bienes materiales y económicos debes ser distribuidos entre otras congregaciones para de alguna manera “purificar” toda huella de este pederasta infeliz que ha dañado a la iglesia católica, puesto que si Marcial es un Falso profeta, falsa es la congregación fundada por el.

El Padre Marcial Maciel, abusó sexualmente no sólo a jóvenes seminaristas bajo su control, sino también abusó de su propios hijos, según una demanda presentada en Connecticut, Estados Unidos por un hijo de Maciel. En la fotografía vemos de short a Marcial con unos jóvenes hombres y mujeres.

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