jueves, 9 de septiembre de 2010

EL BICENTENARIO, UNA OPORTUNIDAD PARA RECORDAR NUESTRA IDENTIDAD VERDADERA

Por: Lucrecia Rego de Planas

Todos los mexicanos que nacimos después de 1917 estudiamos, en los libros de texto gratuitos, una Historia de México falseada, mutilada y maquillada por los gobiernos masones que tuvimos.

Cualquiera de nosotros podrá recordar decenas de páginas dedicadas a exaltar las culturas indígenas, de tal manera que casi llegábamos a creer que sus dioses paganos eran buenos y que era muy sano extraer corazones humanos para procurar la lluvia y la fertilidad; luego, estos mismos textos nos hablaban de una conquista cruel y sangrienta, siempre presentada como “el enemigo” que vino a destruir todo lo bueno que los indios tenían.

También podemos recordar la poquísima importancia que en estos textos se daba a la época virreinal y colonial (300 largos años de historia a los que se le dedicaban dos o tres páginas cuando mucho), donde se pasaban de largo todas las buenas acciones de los evangelizadores. Y después la lucha de independencia, presentada siempre como la liberación de las ataduras que nos habían impuesto los malvados invasores.

Jamás se nos hablaba (en más de dos renglones) de la gran obra que realizó la Iglesia en la época de la conquista y de la colonia (alfabetización, construcción de escuelas, hospitales, talleres, imprentas, universidades). Tampoco se nos hicieron ver las razones religiosas (profundamente cristianas) que motivaron el movimiento independiente. Se nos decía, sí, que una de las causas habían sido las ideas de la Revolución francesa, pero jamás se nos aclaró que el movimiento estuvo motivado justamente para no dejar que esas ideas de la masonería destruyeran la fe del pueblo mexicano. Iturbide, el verdadero libertador, quien logró la Independencia poniendo a la Religión católica como una de las tres garantías de nuestro pueblo, pasa casi desapercibido.

Nuestros libros de texto de Historia no hablaban del fenómeno guadalupano, ni de las consecuencias culturales de la expulsión de los jesuitas de nuestro territorio y mucho menos de las guerras cristeras, que son ejemplo claro de cómo el pueblo mexicano se opuso con valentía al arrebato de sus convicciones más intimas.

Ahora se nos presenta la celebración del Bicentenario de la Independencia como una oportunidad única para que los católicos podamos conocer la verdadera historia de nuestra nación sin maquillajes jacobinos. Es una oportunidad para escarbar en el corazón de nuestros héroes y descubrir ahí las razones, fundamentalmente religiosas, que los motivaron en cada una de sus acciones. Una oportunidad para recuperar nuestra identidad mexicana, formada por la síntesis perfecta de la cultura indígena enriquecida con los valores cristianos.

5 comentarios:

  1. Solo expresar que la fulana llamada Lucrecia Riego de Planas censura y reprime cualquier opinion proveniente de Sinarquistas.

    Por lo tanto, quede testimonio de que a pesar de eso, le publicamos un articulo a esa fulana de tal.

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  2. Lucrecia como es blanca
    española americana
    ella quiere legitimar
    a su casta pa' que gobierne
    en la hoy tierra "mexicana".

    Los españoles americanos
    o "criollos", como les digan,
    nos tienen el pie en el pescuezo
    a los "indios", y con perverso
    afán nos discriminan.

    Lucrecia y toda su casta
    se disfrazan con gran tino:
    se desligan de los españoles,
    los tiranos opresores
    sus veros antecesores
    de los "indios" asesinos,
    para seguir gobernándonos
    y oprimiendo nuestros destinos.


    "La Virgen María
    es nuestra protectora
    nuestra defensora
    no hay nada qué temer.

    Somos indianos
    esta tierra reclamamos
    guerra, guerra al mexinaco cruel
    guerra, guerra contra el "criollo" cruel".

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  3. Siendo la “iglesia católica” la religión oficial del imperio español y “Sacro imperio romano”, munchas veces esa “iglesia” se establecía tras el exterminio de grupos “indios” que no se sometían fácilmente al yugo de los españoles, sobre todo en el norte ocurrió eso con los pueblos de “indios” chichimecas, exterminio llevado a cabo por las milicias reales españolas que les daban a los religiosos las condiciones necesarias para poder establecer conversiones o “misiones” (las cuales no sólo tenía un fin religioso sino también político, el de reducir a los “indios” en territorios compactados para que quedaran más tierras para los españoles, no obstante hay que reconocer que esas reducciones tuvieron su lado positivo porque en ellas se les confirió gobierno autónomo a los “indios” formando las llamadas Repúblicas de Indios, lo que permitió la reconstrucción de algunas de las culturas indianas, aunque contaminadas con la “cultura” española, y que la población de naturales diezmada durante el siglo XVI volviese a aumentar). Un caso muy conocido y que seguramente encontrarán referido en más de una página web es el caso de la “pacificación” (exterminio de los “indios” jonaces) que llevó a cabo Joseph de Escandón en la Sierra Gorda, después de la cual se fundaron las famosas 5 misiones de la Sierra Gorda que pertenece hoy al estado de Querétaro, y otro caso que conozco fue en Bolaños, Jalisco que es mucho menos conocido, donde también los naturales sufrieron exterminio. Además de eso la imposición del “catolicismo” implicó la destrucción de munchas culturas indianas, y esa historia no es sólo de estas tierras que la casta de ustedes, los españoles americanos o “criollos”, llamaron “Estados Podridos Mexinacos”, sino también pasó algo muy parecido en lugares del “viejo mundo”, como en Irlanda en donde la imposición del “catolicismo” de rito romano vigente en esas tierras se llevó a cabo por la invasión inglesa ocurrida en el medioevo, y esa imposición implicó borrar el cristianismo de rito celta asociado a san Patricio, a quien no obstante el catolicismo vigente en Irlanda lo toma de banderita, y la invasión inglesa implicó además la destrucción de gran parte de la cultura celta irlandesa, como el hecho de que quedan pocos habvlantes del gaélico. Es muy diferente ver la historia desde la visión de los vencidos que como la ven ustedes los “criollos” desde la visión de los vencendores.

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  4. Hay que aclarar que cuando los españoles exterminaban a los chichimecas alentaban a pueblos sedentarios de naturales para que poblaran los tarritorios de esos chichimecas.

    Y otra aclaración:
    Lucrecia se suele referir a las culturas indianas escribiendo el término cultura entre comillas, es decir que no considera a los naturales como poseedores de cultura e tampoco por lo tanto les tiene por seres humanos, es decir que es la evidencia de que en la derecha mexinaca se conservan aún las vetustas ideas de Juan Ginés de Sepúlveda. Incluso la postura de Catholic.net es reafirmar la "superioridad" de los españoles sobre los "indios", ya que por ejemplo tienen en ese sitio un artículo (http://es.catholic.net/conocetufe/358/1767/articulo.php?id=6747) y se puede descargar un libro en formato WORD (http://es.catholic.net/biblioteca/libro.phtml?consecutivo=257), los cuales tratan sobre la historia de la "evangelización" colonial y por ende toca cuestiones sobre el "descubrimiento" y la "conquista" de América, y de entrada verbi gratia lo primero que hace el autor, español, es reivindicar que los españoles "descubrieron" América aún para los indios porque estos últimos, da a entender, estaban tan "atrasados" o "incivilizados" que no podían viajar y no se conocían los diferentes grupos humanos nativos entre sí, ni siquiera los que vivían más cercanos entre sí, y el conocimiento más amplio de los diferentes grupos humanos y regiones de las Américas se dio, según él, hasta que llegaron los hispanos, cuando eso es totalmente falso porque la arqueología señala que por ejemplo la alfarería prehispánica surgió en la América austral, más o menos por donde hoy es Ecuador se han encontrado los restos de cerámica más vetustos de la cultura conocida como "Valdivia", y asimismo la metalurgia prehispánica nació en América del Sur, más o menos en una zona que comprende lo que hoy es Colombia, Perú y Ecuador, y de por allá llegó hasta lo que hoy es México la alfarería y metalurgia prehispánicas, y eso sólo pudo ocurrir, contrario a lo que dice el autor de ese artículo e libro que difunden en Catholic.net, por un contacto de intercambio entre grupos de Sudamérica y estas tierras que llaman en términos arqueológicos "Mesoamérica", que corresponden más o menos a la porción sur del hoy "México".

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  5. No sé porque en un Blog NAcionalista se le publica a la fulana Lucrecia, una gata mas de los Legionarios. Mismos que intentaron corromper al Sinarquismo para hacer un partido y no puieron.

    Por eso Lucrecia reprime a las opiniones sinarquistas. Porque el Nacionalismo le cauza urticaria.

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