lunes, 27 de septiembre de 2010

CELEBRAREMOS ORGULLOSOS LA CONSUMACIÓN DE NUESTRA INDEPENDENCIA



Por: Antonio Mota
ASI-NACIONAL

En una celebración de la consumación de nuestra independencia nacional, escuche con atención y conmovido por las palabras expresadas por el conferencista, el cual se lamentaba de que nuestro país no celebra oficialmente su independencia nacional.

Este año 2010 un gobierno no priista preparo con bombo y platillo la celebración del Bicentenario de la Independencia de México, prácticamente certificando lo que por muchos años los gobiernos revolucionarios han oficializado la mentira, el engaño y la calumnia de nuestra fecha verdadera de nuestra independencia.

El gobierno de Felipe Calderón abandero como suya la idea de seguir mintiéndonos a los mexicanos y seguir manteniendo oficialmente en el olvido la fecha del 27 de septiembre de 1821, en que nuestra patria culmino su independencia.

Es falso que el Bicentenario de la independencia es en este 2010, el verdadero Bicentenario de nuestra independencia se celebrara en el año de 2021, les guste o no a nuestros gobernantes, y aunque les duela el verdadero Padre de nuestra Independencia es AGUSTÍN DE ITURBIDE.

Hoy, que nadie piensa en monarquías fallidas, y que el autoritarismo político y la dictadura disfrazada comienzan a ceder en favor de la democracia es bueno que volteemos a ver la senda que otros nos marcaron. Si la Unión fue la clave para llegar, sin matarnos, a una independencia pactada, que sea la unión la forma de establecer una democracia pactada entre todos. El dos de julio del 2000 supimos encontrar la forma de ser democráticos, hagamos ahora realidad la frase de Iturbide; nos toca a nosotros, una vez más, el determinar cómo ser felices. Permanezcamos unidos y en 2021, al celebrarse el segundo centenario de nuestra independencia, tal vez seamos esa nación igualitaria y fuerte que Iturbide imaginó.

El odio que oficialmente y claramente se profesa a Agustín de Iturbide Arámburu- verdadero y único padre de la Independencia-, no es producto de la ilustración ni de la honradez, virtudes de las que carecen sus más enconados enemigos, sino de la pasión, de la más absoluta falta de moralidad y de la más completa ignorancia en cuestiones históricas.

Ninguna figura de la historia de México, ha sido víctima de la injusticia, de la calumnia y de la inquina de partido, como la de Don Agustín de Iturbide, que de manera mañosa e ingrata, desde las escuelas los profesores les enseñan a sus alumnos desde las primeras lecciones de historia que no es historia, a odiarlo y a prodigarle toda clase de epítetos hasta convertirlo en un ser repugnante, aunque otros llamados “héroes” sí lo sean de verdad.

Este mes de septiembre se celebrará el Bicentenario DEL INICIO de la Independencia, que será incompleta, coja, porque ya desde ahora las autoridades responsables de dicha celebración tienen mucho cuidado, como siempre lo han hecho, de omitir el nombre de Iturbide. De manera irresponsable se pretende convertir sin rubor, en beneficiario exclusivo de la creación de la Bandera, del Plan de Iguala y de la Consumación de la Independencia, al general Vicente Guerrero Saldaña, sin que nadie, desde el punto de vista histórico, pueda acreditarlo como legítimo propietario de una gloria que jamás le pertenece.

Siempre que se opina acerca de algún personaje canonizado por la historia oficial, para señalarle abrumadoramente sus imperdonables errores, o bien se irritan ferozmente esos hombres que practican el culto idolátrico a los héroes oficiales- ante la evidente y sorprendente exposición de la verdad- , o bien acuden a un sentimentalismo lleno de compasión para salvar del ridículo a sus personajes históricos, aduciendo: Bueno…; pero hay que tomar en cuenta que fueron seres humanos, y como tales, tuvieron sus errores. O bien dicen piadosas y acongojadamente, pero siempre fuera de las normas de la Historia: veamos sus cosas buenas y olvidémonos de las malas.

Sin embargo, cuando se trata de un personaje como Iturbide, proscrito de los anales de la historia oficial, no se aplica el mismo criterio dulzón que a los demás, simplemente se le acumulan cargos, se le insulta y se le denigra, porque para esa raza calumniadora, incrédula y adúltera, Agustín Cosme Damián de Iturbide Arámburu, no fue un ser humano. ¿Entonces, qué carajo vamos a celebrar?

Pero eso es lo que ellos creen y adulteran la historia patria, pero seguimos en pie organizaciones nacionalistas, patrióticas que no nos tragamos esa historia oficialista, mentirosa y calumniadora, y aunque les duela hoy 27 de septiembre de 2010, celebraremos orgullosos la consumación de nuestra independencia, celebraremos orgullosos al libertador Agustín de Iturbide y celebraremos orgullosos y comprometidos a seguir luchando por la religión la unión y la independencia representada en nuestro lábaro patrio.

¡VIVA MÉXICO!
¡VIVA NUESTRA INDEPENDENCIA NACIONAL!
¡VIVA AGUSTÍN DE ITURBIDE!

*Bibliografía
Chopín Cortés, Ángel, Iturbide, monólogo, obra inédita.
Salmerón, Celerino, En defensa de Iturbide, Editorial
Tradición, México, 1985, pp. 18 y 25.

1 comentario:

  1. PRIMERO QUE TODO DEVEMOS DE CONOCER LOS CATOLICOS Y LOS MEXICANOS QUE LOS ENEMIGOS DE LA PATRIA NO DESCANSAN LOS COMUNISTAS MASONES Y JUDIOS

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