Por: Antonio Mota
ASI-NACIONAL
Todos los sucesos de violencia por los que atraviesa nuestro país son lamentables, ciudadanos, artistas, políticos, hombres mujeres y niños han sido victimas de esta guerra contra la delincuencia organizada.
El crimen organizado, se ha venido “fortaleciendo” gracias a la corrupción por la que gobiernos del pasado la permitieron y participaron en ella. Ahora la infiltración del crimen organizado en las policías a todos los niveles así como en los gobiernos federal, estatal y municipal es una realidad. Triste pero es la realidad.
La delincuencia organizada ha sido muy ladina, ha sido “capases” de penetrar en las policías, en los políticos, en los artistas, en las religiones, en el ejército, en nuestros jóvenes.
Los partidos políticos contrarios al PAN, periodistas, politólogos, organizaciones civiles, empresarios y muchos sectores mas, critican la lucha emprendida por el Gobierno Federal de Felipe Calderón, pero sólo la critican, pero no aportan medidas de solución, planes o ideas.
Otros políticos ofrecen la opción de legalizar las drogas, acción que seria totalmente errónea, se deben de aplicar las leyes, ya no digamos el cambiarlas, con el simple hecho de que se aplicaran, el cambio se notaria, pero lamentablemente se anteponen los intereses personales de partidos y de los pequeños grupos de poder que existen en México. Aunado a la grave corrupción que hay en el sector político del país aunado a la corrupción de la sociedad.
El “me vale madre”, a mi no me paso nada, no es un hecho aislado. Decir “que bueno que no fui yo”, o que “no fue mi candidato” nos hace cómplices de la propia delincuencia organizada. Es inaceptable quedarnos con los brazos cruzados, somos más que un pequeño grupo de delincuentes desvergonzados.
Necesitamos arrebatarles nuestro país, México debe volver a la paz y la tranquilidad, debe de volver a ser un país seguro, un país donde a pesar de nuestras diferencias religiosas e ideológicas vivamos en tolerancia, en el respeto a nuestras leyes y siempre procurando el bienestar social.
Los lamentables sucesos ocurridos durante este sexenio nos deben de unificar, nadie puede vivir fuera de las leyes.
Secuestros, asesinatos, desaparecidos, balaceras, drogadicción, extorsión, corrupción son acciones que debemos solucionar, pero en serio. Basta de hacerle al “tío lolo”, de hacernos pedazos, pero al final no hacer absolutamente nada.
La muerte de los candidatos, los secuestros, la desaparición de Diego Fernández, la muerte de inocentes, el atentado y asesinatos de periodistas no se solucionan con una simple reunión del gabinete de seguridad, eso es lo que siempre a realizado el gobierno federal, a cada echo, una reunión, resultado cero.
Es el momento de responsabilidad, no solo del gobierno federal, es responsabilidad de todos los partidos políticos, de todos los gobernadores y presidentes municipales, de diputados y senadores el hacer e implementar acciones reales ante la inseguridad publica.
Señores políticos, dejen de anteponer sus intereses políticos y personales y hagan algo por la seguridad nacional, tomando en cuenta a la ciudadanía en general, en estos momentos de crisis debemos actuar con responsabilidad, sin miedo y decididos a recuperar la paz y la seguridad de México.
Aplaudimos la determinación del Instituto Electoral de Tamaulipas, de continuar con el proceso electoral para las elecciones del 4 de julio; “Todos somos Tamaulipas” deberá sustituir a Rodolfo Torre, asesinado este lunes, según lo marca la fracción III del artículo 27 del Código Electoral.
Las elecciones para elegir gobernador de Tamaulipas, no deben ser suspendidas, pese a los lamentables hechos, no permitiremos que nos intimiden ni que también asesinen a la democracia.
Lamentamos el ejercicio de la violencia y condenamos todo apartamiento de la ley y el Estado de Derecho. No permitamos que el mal se anteponga al bien, unamos nuestras acciones por un México seguro, decidido y activo.
¡Viva México!
ASI-NACIONAL
Todos los sucesos de violencia por los que atraviesa nuestro país son lamentables, ciudadanos, artistas, políticos, hombres mujeres y niños han sido victimas de esta guerra contra la delincuencia organizada.
El crimen organizado, se ha venido “fortaleciendo” gracias a la corrupción por la que gobiernos del pasado la permitieron y participaron en ella. Ahora la infiltración del crimen organizado en las policías a todos los niveles así como en los gobiernos federal, estatal y municipal es una realidad. Triste pero es la realidad.
La delincuencia organizada ha sido muy ladina, ha sido “capases” de penetrar en las policías, en los políticos, en los artistas, en las religiones, en el ejército, en nuestros jóvenes.
Los partidos políticos contrarios al PAN, periodistas, politólogos, organizaciones civiles, empresarios y muchos sectores mas, critican la lucha emprendida por el Gobierno Federal de Felipe Calderón, pero sólo la critican, pero no aportan medidas de solución, planes o ideas.
Otros políticos ofrecen la opción de legalizar las drogas, acción que seria totalmente errónea, se deben de aplicar las leyes, ya no digamos el cambiarlas, con el simple hecho de que se aplicaran, el cambio se notaria, pero lamentablemente se anteponen los intereses personales de partidos y de los pequeños grupos de poder que existen en México. Aunado a la grave corrupción que hay en el sector político del país aunado a la corrupción de la sociedad.
El “me vale madre”, a mi no me paso nada, no es un hecho aislado. Decir “que bueno que no fui yo”, o que “no fue mi candidato” nos hace cómplices de la propia delincuencia organizada. Es inaceptable quedarnos con los brazos cruzados, somos más que un pequeño grupo de delincuentes desvergonzados.
Necesitamos arrebatarles nuestro país, México debe volver a la paz y la tranquilidad, debe de volver a ser un país seguro, un país donde a pesar de nuestras diferencias religiosas e ideológicas vivamos en tolerancia, en el respeto a nuestras leyes y siempre procurando el bienestar social.
Los lamentables sucesos ocurridos durante este sexenio nos deben de unificar, nadie puede vivir fuera de las leyes.
Secuestros, asesinatos, desaparecidos, balaceras, drogadicción, extorsión, corrupción son acciones que debemos solucionar, pero en serio. Basta de hacerle al “tío lolo”, de hacernos pedazos, pero al final no hacer absolutamente nada.
La muerte de los candidatos, los secuestros, la desaparición de Diego Fernández, la muerte de inocentes, el atentado y asesinatos de periodistas no se solucionan con una simple reunión del gabinete de seguridad, eso es lo que siempre a realizado el gobierno federal, a cada echo, una reunión, resultado cero.
Es el momento de responsabilidad, no solo del gobierno federal, es responsabilidad de todos los partidos políticos, de todos los gobernadores y presidentes municipales, de diputados y senadores el hacer e implementar acciones reales ante la inseguridad publica.
Señores políticos, dejen de anteponer sus intereses políticos y personales y hagan algo por la seguridad nacional, tomando en cuenta a la ciudadanía en general, en estos momentos de crisis debemos actuar con responsabilidad, sin miedo y decididos a recuperar la paz y la seguridad de México.
Aplaudimos la determinación del Instituto Electoral de Tamaulipas, de continuar con el proceso electoral para las elecciones del 4 de julio; “Todos somos Tamaulipas” deberá sustituir a Rodolfo Torre, asesinado este lunes, según lo marca la fracción III del artículo 27 del Código Electoral.
Las elecciones para elegir gobernador de Tamaulipas, no deben ser suspendidas, pese a los lamentables hechos, no permitiremos que nos intimiden ni que también asesinen a la democracia.
Lamentamos el ejercicio de la violencia y condenamos todo apartamiento de la ley y el Estado de Derecho. No permitamos que el mal se anteponga al bien, unamos nuestras acciones por un México seguro, decidido y activo.
¡Viva México!
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